Una paleta de colores sencilla y materiales naturales ha sido todo lo necesario para convertir esta vivienda costera en algo espectacular.
Una manera muy fácil, barata y sencilla de tener este reloj minimalista en vuestra casa. Tan solo necesitarás:
- 1 Tabla redonda de cortar.
- Cinta de cuero o un antiguo cinturón fino.
- Mecanismo de reloj (asegurase que puede pasar por el ancho de la madera)
- Maquina de agujerear cuero.
- Dos remaches o tornillos bonitos.
Instrucciones:
3) Corta una tira de cuero negro a la
longitud que desees. Recorta los bordes cuidadosamente y luego haz un agujero en cada extremo usando la maquina troqueladora. Este agujero deberá ajustarse a los remaches o tornillos que hayas elegido.
4) Marca en el borde tabla el punto donde fijarás cada tornillo y haz un pequeño taladro. Esto permitirá que los tornillos entren más fácilmente.
5) Fija un extremo de cuero con el tornillo hasta
que este quede al ras (ayudate con un destornillador). Repetir en el otro lado.
6) Pasa el mecanismo del reloj a través del
orificio central. ¡Colocale pilas y a presumir de reloj!
Los editores Katrine y Jacob no solo han llenado su casa con libros bellos, sino también con arte, arquitectura y diseño. Esta vivienda es una joya en sí misma gracias a su estuco, molduras y suelo de espiga. Cada detalle está pensado cuidadosamente y el mobiliario elegido con gusto y detalle.
Ikea lanza en Octubre su nueva colección Sinnerlig donde combinan materiales naturales (corcho y madera) con materiales más rígidos (metal, vidrio, cerámica). Esta colección es perfecta para el otoño por su tonalidad marrón y verde oscura.
Ha sido creada por Ilse Crawford (importante diseñadora de Gran Bretaña). Ella explica "Es muy importante obtener cualidades humanas como la calidez, el bienestar y el cuidado en el producto final. Si bien esto puede sonar sencillo, en la práctica es un proceso riguroso. Se trata de analizar constantemente cómo se utilizará un producto y sus dimensiones. Abordar la forma en que nos movemos intuitivamente, cómo nos reunimos socialmente y como la comprensión de las cosas nos conectan a nivel humano".
Queda poco para empezar a soñar con países lejanos donde se puede disfrutar del sol y el calor por un tiempo más. Esta vivienda se encuentra en uno de esos lugares, en la isla malasia de Penang. Esta isla atrae a muchas personas creativas de todo el mundo, y no es casualidad. Penang tiene una población de distinto origen étnico, cultural y religioso que hace que el estilo de vida sea intenso y cambiante. Paseando por sus calles, uno podría tener la sensación de estar paseando por Milán o Nueva York.
Así es también la casa de alquiler Sekeping Victoria. La casa forma parte de un proyecto más amplio denominado Sekeping, que incluye el diseño de varias propiedades de alquiler en todo Malasia. Ng Sek San, jefe y diseñador explica su trabajo así: "nuestros proyectos no están centrados en la restauración de casas antiguas para devolverles su antigua gloria, sino en que cuenten sus propias historias".
Céntimos. Esas monedas que nunca sabes como quitartelas de encima. Alguien que pensaba exactamente igual tuvo una idea brillante, revestir paredes o muebles con esas monedas que nadie quiere. El resultado es inimaginable, un material barato que se convierte en auténtico lujo.
Esta claro que si quieres hacer algo así en tu vivienda te tendrás que armar de paciencia, no solo para recolectar estas pequeñas monedas, sino para colocarlas. Pero merecerá la pena, dejarás a todo el mundo con la boca abierta.
Otra opción más sencilla es forrar una mesa o algún objeto decorativo. Aunque el resultado es menos impactante, queda genial.
¡Nunca más verás a las monedas de cobre de la misma manera!
Vi este DIY en la página papernstitchblog y me pareció una manualidad muy sencilla y bonita. Si le echáis un vistazo a la web encontraréis muchas actividades que podéis hacer. El blog está en inglés pero la verdad que al tener muchas fotos es muy de entender.
Para este DIY necesitaréis:
- Arcilla blanca
- Cuchillo normal o especial para arcilla (opcional)
- Palillos
- Cuerda fuerte, a mi me gusta mucho tipo Kraft
- Un pequeño botecito con agua.
1) Hacer una bola de unos 3cm de diámetro con la arcilla húmeda, una vez esté bien redondeada aplástala hasta que tenga un grosor de unos 8 mm. Corta los bordes para que te quede una circunferencia perfecta de unos 6cm.
2) Haz un churro con el resto de la arcilla. Tiene que ser grueso y bastante largo.
3) Empieza a enrollar el churro en la circunferencia. Una vez hayas terminado, moja tus dedos y aplana toda la superficie para que esta quede bien compactada y unida. Dale forma orgánica moldeado la superficie, también puedes darle alguna textura utilizando el palillo.
4) Hazle dos agujeros en los laterales con ayuda del palillo, tendrán que ser lo suficientemente anchos para que puedas introducir por ellos la cuerda que has elegido. Una vez lo tengas listo déjalo secar al menos 24h. Es conveniente que le des la vuelta una vez hayan pasado 12 h para asegurarte que todas las caras se secan por igual.
5) Una vez esté seca, coloca la cuerda, la planta y ¡listo! Ya tienes tus maceteros colgantes.
Espero que te haya gustado, hasta la próxima :)